Daniel Moreno, estudiante de primero del Grado en Diseño y Producción de Videojuegos, ha ganado la sexta edición de la Global Game Jam de Vilanova y la Geltrú, que se celebró en el espacio Neapolis del 20 al 22 de enero. Se trata de un concurso internacional que se celebra anualmente en más de 600 sedes repartidas en todo el mundo.Los participantes del concurso tienen que crear y diseñar un juego o videojuego en un tiempo máximo de 48 horas.

En esta edición participaban cerca de noventa jóvenes, divididos en dieciséis equipos. Daniel Moreno ha ganado con su equipo el primer premio con el juego BYR Waves, en el que ya se puede se puede jugar con el controlador Xbox. 

¿Es la primera vez que participabas en una actividad de estas características?

Es la primera vez que participaba en un evento relacionado con la creación de videojuegos. Pensé que era una buena idea participar sobre todo para mejorar mis habilidades a la hora de trabajar en equipo. La experiencia de vernos a todos los miembros del equipo trabajando en un mismo proyecto y viendo como poco a poco construimos algo me parecía fascinante e increíblemente tentadora.

El objetivo de la Global Game Jam es que los participantes creen un juego de principio a fin en un máximo de 48 horas. ¿Cómo lo viviste?
Lo viví muy intensamente, todos lo hicimos. Teníamos muy poco tiempo tanto para pensar en una buena idea de juego como para crear el videojuego. Al principio la situación resultaba un poco intimidatoria ya que estar rodeado de muchas persones con tantos conocimientos me hacía sentir pequeño. Pero cuando empecé a trabajar me di cuenta que no había motivos para sentirme así, al contrario.

¿Nos podrías explicar brevemente en qué consiste el juego que habéis creado?
El juego se llama BYR Waves y es un juego arcade donde llevamos a una chica sobre una plataforma que está rodeada de altavoces, desde donde van apareciendo enemigos, en forma de oleadas. Estos enemigos, que son ondas de color azul, verde, amarillo o blanco, tratan de entrar en contacto con la plataforma para restar vidas al personaje, que tiene que emitir ondas de sus colores para poder destruirlos.

¿Cuál es el premio?
El principal premio por haber ganado son seis meses de trabajo en una sala habilitada para nosotros en el espacio Neapolis de Vilanova y la Geltrú, un pack de cinco juegos y algunos periféricos. Además, en la entrega de premios también recibimos un diploma que acredita la victoria i un trofeo impreso con una impresora 3d.

Eres estudiante de primero del Grado en Diseño y Producción de Videojuegos. ¿Qué es lo que te apasiona más?
Escogí este grado porque sentí la necesidad de adquirir más conocimientos para ser mejor en mi trabajo. De momento lo que me apasiona más es la programación, y es curioso porque cuando estudiaba el ciclo formativo de grado superior era lo que menos me gustaba. Pero cuando la entiendes y le encuentras una utilidad, empiezas a valorar la programación como una herramienta más. Aunque no quiero dedicarme a la programación, sí que pienso que servirá para que mi contenido gane en calidad. 

La creación de un videojuego se basa en varias “secciones” o especialidades. ¿Cuál te gustaría perfeccionar?
Me interesa el modelado 3D, tanto de personajes como de escenarios. No obstante, me decanto más por los escenarios, ya sea por el diseño, el modelado o la animación de los mismos. Aun así, me encanta aprender cosas nuevas cada día, sobre todo si son útiles para mi trabajo.
 


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